Todos escuchamos acerca de la permacultura, pero ¿sabemos realmente qué es?
La palabra permacultura es una contracción de la agricultura y permanente, este movimiento fue inventado en los años 70 por los australianos Mollison y Holgrem, precursores del surgimiento de la conciencia ecológica, su observación fue simple: "la agricultura industrial amenaza la biodiversidad y la fertilidad del suelo, por lo tanto, es necesario crear y desarrollar sistemas agrícolas estables y resilientes "
De este modo, podemos definir la permacultura como un modo de agricultura que utiliza pocos recursos energéticos y la intervención humana, dejando a la naturaleza salvaje el mayor espacio posible.
Pero antes de ser una técnica de agricultura ecológica o jardinería, la permacultura es sobre todo una filosofía de vida donde los animales, los insectos, los seres humanos, las plantas y los microorganismos viven en armonía en un ambiente sano y autosuficiente.
La permacultura tiene como objetivo hacer de nuestro hábitat un ecosistema armonioso, productivo, autónomo, regenerado naturalmente, respetuoso de la naturaleza y de todos sus habitantes. El objetivo de la permacultura es cuidar la naturaleza, las personas y compartir equitativamente.
Por lo tanto, la permacultura no es solo una técnica agrícola. Su alcance es más amplio. Consiste en diseñar espacios habitables sostenibles y resistentes. Por lo tanto, incorpora todas las buenas prácticas en la agricultura ecológica, pero también las energías renovables y la construcción ecológica.
Uniéndose a los principios del desarrollo sostenible, la permacultura aboga por la cultura de la permanencia y requiere que los seres humanos se vuelvan menos dependientes de los sistemas de producción y distribución industrial.
No podemos hablar de permacultura sin pensar en su partidario más ferviente, Pierre Rabhi, ecologista, ensayista, agricultor y, en particular, el fundador del Movimiento Colibris, una asociación creada en 2007.
La misión de la asociación es "inspirar, conectar y apoyar a los ciudadanos comprometidos en un proceso de transición individual y colectivo". Realiza una serie de actividades orientadas a promover prácticas de agricultura ecológica, vivienda participativa, educación alternativa, gobernanza participativa y consumo responsable.
Pierre Rabhi escribió en 2010 la carta internacional para la Tierra y el Humanismo. Destaca propuestas de un modelo de sociedad donde “el tiempo ya no rima con el dinero, donde el silencio es maravilloso, donde hay que vivir para cuidar la vida. "
En conclusión, la permacultura se basa en principios tan antiguos como el mundo: la observación cuidadosa de la naturaleza, que es perfecta como es y puede manejarse perfectamente sin la mano del hombre.
“Tendremos que responder a nuestra verdadera vocación, que no es producir y consumir hasta el final de nuestra vida, sino amar, admirar y cuidar la vida en todas sus formas. »Pierre Rabhi
Más información: www.colibris-lemouvement.org/
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