El sindicato de empleados de un operador de telefonía móvil del lado holandés ganó su caso contra el empleador que había decidido, sin consultar y sin acuerdo, suprimir el plan de ahorro para empleados.
Este plan de ahorro para empleados se puso en marcha en 2016 tras un acuerdo entre la empresa y el sindicato de trabajadores. En junio de 2020, el dirigente decidió quitarlo para hacer frente a las consecuencias económicas de la pandemia. Envía una carta al sindicato para informarles. Dos meses después, el gremio se entera por parte del banco que el plan de ahorro ya no tendrá continuidad a partir de enero de 2021. Estupor, porque según el gremio, esta medida no formaba parte de las negociaciones. De ahí la acción legal. La audiencia tuvo lugar el pasado mes de marzo y la sentencia se publicó recientemente. Los jueces consideraron que el acuerdo de 2016 celebrado entre el empleador y el sindicato no incluía una cláusula de terminación o cancelación del plan de ahorro. Para los jueces, en 2020 "solo era posible un ajuste de la contribución" al plan. Se ordena al administrador restablecer esta medida con efectos retroactivos a partir de febrero de 2021. (soualigapost.com)
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