En la víspera de Año Nuevo, un padre bajo la influencia del alcohol, usó un arma de fuego y disparó dentro de su casa, ubicada en Quartier d'Orléans. En pánico, su familia logró refugiarse en una habitación, fuera del alcance del pistolero loco.
El individuo caminó con calma en su balcón y nuevamente disparó varias balas hacia la carretera. Afortunadamente, nadie fue afectado. Solo los vehículos estacionados en la calle recibieron impactos de bala, causando daños a la propiedad.
Alertados de inmediato, los gendarmes fueron al lugar y procedieron a arrestar al individuo que no opuso resistencia a la policía.
Primero puesto bajo custodia policial, el hombre fue presentado ante el juez de libertad. Este último ordenó su detención preventiva en los locales de la Policía de Fronteras (artículo 937 del Código de Procedimiento Penal).
Será juzgado hoy, en comparecencia inmediata, ante el Tribunal Penal de Saint-Martin._AF
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