Recientemente, una comisión encargada por el Banco Mundial (que administra las donaciones otorgadas a Sint Maarten) llevó a cabo mediciones de humos tóxicos resultantes de la combustión de desechos en el vertedero de Philipsburg. Un artículo en el periódico holandés Volkskrant acusa al gobierno de Sint Maarten de querer mantener este informe en secreto.
"Los funcionarios que trabajan en el tema en el gobierno recibieron una copia de las líneas principales de este informe el 20 de octubre", dijo Leona Marlin, Premier de Sint Maarten, durante una conferencia de prensa del Consejo de Ministros el 7 de noviembre. "Este informe está siendo finalizado. Depende del Banco Mundial, no depende de nosotros compartirlo ”, agregó.
Emil Lee, Ministro de Salud, que asistió a estas encuestas, quiso aclarar la situación. "No hay duda de que las emisiones del vertedero son malas para la salud de los habitantes", dijo sobre todo. Sin embargo, aclaró que el informe en cuestión no tenía la intención de estudiar la toxicidad de los humos para los habitantes de los alrededores. Su propósito es determinar qué precauciones deberá tomar la compañía que intervendrá para extinguir los incendios subterráneos que se queman permanentemente en el vertedero, a fin de proteger a sus empleados. Los datos recopilados no se pueden usar para determinar el impacto del humo en el área circundante. Sobre este punto, Leona Marlin aseguró que se estaban discutiendo sobre la implementación de una prueba permanente de la calidad del aire cuyos datos se compartirían con la población.
(Fuente: www.soualigapost.com)
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