Las mantarrayas son criaturas muy carismáticas que también viven en las aguas del Caribe. Además de ser muy valorados por los buzos y los buceadores por su belleza, también son importantes para la salud de los océanos, ya que pueden ayudar a controlar el plancton y garantizar el ciclo de nutrientes.
Aún así, las mantarrayas están amenazadas por diversas actividades humanas. Afortunadamente, se considerará una mayor protección de la mantarraya oceánica gigante en la región del Caribe en la próxima reunión de la Conferencia de las Partes del Convenio de Cartagena (COPS), que se llevará a cabo durante 2023 en Aruba.
Mantarrayas en el Caribe
El Caribe es el hogar de dos especies de mantarrayas, la mantarraya oceánica gigante (Mobula birostris) y la mantarraya caribeña. Mobula birostris es la más grande de las rayas. Puede alcanzar una envergadura de 7 metros (máximo conocido de 9 metros) y un peso de 1 kg. No presenta ningún peligro para los humanos.
Las mantarrayas se alimentan por filtración y absorben alimentos microscópicos (plancton) que incluyen larvas de peces, krill, camarones y cangrejos planctónicos de la columna de agua y los filtran a través de sus placas branquiales. Desempeñan un papel vital en el mantenimiento de la salud de los océanos al regular los niveles de plancton. A medida que se mueven entre la superficie del océano, las aguas profundas y los arrecifes de coral, crean una valiosa conexión ecológica mediante el transporte de nutrientes.
Mantarrayas: una especie en peligro de extinción
Las mantarrayas están amenazadas por diversas actividades humanas. Una de las mayores amenazas para estas criaturas en todo el mundo es la sobrepesca, ya que a menudo son el objetivo de sus branquias, que se utilizan en la medicina tradicional china. También están amenazados por la captura incidental, los enredos, la destrucción del hábitat y la contaminación. La captura incidental y los enredos son probablemente las dos mayores amenazas en el Caribe.
Las mantarrayas son las especies de rayas más grandes, viven entre 30 y 50 años y se reproducen lentamente. La edad a la que las mantarrayas gigantes pueden reproducirse por primera vez se estima entre los 9 y los 12 años y las mantarrayas solo dan a luz a una cría a la vez. El ciclo de vida lento y la baja tasa de reproducción hacen que las mantarrayas sean extremadamente vulnerables al agotamiento. _AF
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