El jueves pasado se celebró el servicio de Protección maternoinfantil (PMI) de la Comunidad reunió a casi 90 profesionales de la primera infancia en el Grand Case Beach Club para una mañana de concienciación dedicada a síndrome del bebé sacudido.
Dirigida por la doctora Éveline Banguid, directora del servicio PMI, el doctor Durand y la enfermera pediátrica Blandine Daviaud, esta conferencia se inscribe en una fuerte voluntad de prevención y de formación continua. Profesionales de la salud, de la primera infancia, cuidadores de niños, entre ellos una decena de recién titulados del PMI, participaron en esta sesión informativa, en parte organizada a distancia por Bertrand Gimonet, fundador de la asociación. Francia Shaken Baby.
Personalmente afectado por la pérdida de su hijo, víctima de este síndrome, el presidente de la asociación dio un testimonio conmovedor, recordando la brutalidad de este gesto que suele realizar un adulto exasperado por el llanto de un bebé. Cada año, alrededor de 500 bebés son víctimas de sacudidas violentas en Francia. Estos gestos provocan daño cerebral severo, a menudo irreversible, y puede provocar la muerte en el 10% de los casos.
En San Martín, el servicio de urgencias del hospital registra en promedio uno o dos casos por año. Pero las secuelas, a veces invisibles en el momento de los acontecimientos, pueden aparecer mucho más tarde, en forma de trastornos del aprendizaje o del comportamiento. De ahí la importancia de formar a quienes acompañan a los niños pequeños y recordarles que, ante el llanto de un bebé, es mejor alejarse unos momentos y pedir ayuda que cometer lo irreparable. _Vx
Sin comentarios